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Poemas en Inglés es un blog que pretende acercar poemas de lengua inglesa al castellano |
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"Por principio, toda traducción es buena. En cualquier caso, pasa con ellas lo que con las mujeres: de alguna manera son necesarias, aunque no todas son perfectas" Augusto Monterroso -La palabra mágica-
"Es imposible traducir la poesía. ¿Acaso se puede traducir la música?" Voltaire
"La traducción destroza el espíritu del idioma" Federico García Lorca |
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Gilbert K. Chesterton -To the unknown warrior- |
Tuesday, February 14, 2006 |
To the unknown warrior Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
You whom the kings saluted; who refused not The one great pleasure of ignoble days, Fame without name and glory without gossip, Whom no biographer befouls with praise.
Who said of you "Defeated"? In the darkness The dug-out where the limelight never comes, Nor the big drum of Barnum's show can shatter That vibrant stillness after all the drums.
Though the time comes when every Yankee circus Can use our soldiers for its sandwich-men, When those that pay the piper call the tune, You will not dance. You will not move again.
You will not march for Fatty Arbuckle, Though he have yet a favourable press, Tender as San Francisco to St. Francis Or all the angels of Los Angeles.
They shall not storm the last unfallen fortress, The lonely castle where uncowed and free, Dwells the unknown and undefeated warrior That did alone defeat Publicity.
Al guerrero desconocido
Tú, a quien saludaron los reyes; quien no se negó Al gran placer de innobles días, Fama sin nombre y gloria sin murmuraciones, Y a quien ningún biógrafo profanó con alabanza.
¿Quién te llamó "Derrotado"? En la oscuridad, La trinchera a donde nunca llega la luz del foco, Ni el gran tambor del show de Barnum puede retumbar, Inquietante vibración después de tantos tambores.
Aunque llegará el tiempo en que cada circo yanqui Pueda valerse de nuestros soldados para hacer sandwiches humanos, Como quien al flautista paga por tocar una melodía. Tú ya no bailarás. No te moverás de nuevo.
No marcharás para Fatty Arbuckle, Aunque todavía tiene buena prensa, San Francis es tan tierno como San Francisco O como los ángeles son a Los Ángeles.
No atacarán el último reducto, Del castillo solitario y libre, Morada del guerrero desconocido e invicto. Eso sólo la Publicidad lo avasalló.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 8:57 PM |
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Gilbert K. Chesterton -The aristocrat- |
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The aristocrat Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
(Collected 1915)
The Devil is a gentleman, and asks you down to stay At his little place at What'sitsname (it isn't far away). They say the sport is splendid; there is always something new, And fairy scenes, and fearful feats that none but he can do; He can shoot the feathered cherubs if they fly on the estate, Or fish for Father Neptune with the mermaids for a bait; He scaled amid the staggering stars that precipice, the sky, And blew his trumpet above heaven, and got by mastery The starry crown of God Himself, and shoved it on the shelf; But the Devil is a gentleman, and doesn't brag himself.
O blind your eyes and break your heart and hack your hand away, And lose your love and shave your head; but do not go to stay At the little place in What'sitsname where folks are rich and clever; The golden and the goodly house, where things grow worse for ever; There are things you need not know of, though you live and die in vain, There are souls more sick of pleasure than you are sick of pain; There is a game of April Fool that's played behind its door, Where the fool remains for ever and the April comes no more, Where the splendour of the daylight grows drearier than the dark, And life droops like a vulture that once was such a lark: And that is the Blue Devil that once was the Blue Bird; For the Devil is a gentleman, and doesn't keep his word.
El aristócrata
(Compilado en 1915)
El Diablo es un caballero: pide que nos quedemos En su pequeño lugar, Cualquiera-que-sea-su-nombre (no está lejos). Dicen que practica un espléndido deporte; siempre tiene algo nuevo, Con escenas de hadas y hechos temibles que sólo él puede maniobrar; Él puede disparar a querubines emplumados si sobrevuelan su terreno, O pesca para el Padre Neptuno usando sirenas como cebo; Y descascara las estrellas en el cielo que así se tambalean en el precipicio; Tocó su trompeta en el cielo —y sobrevivió al dominio De la corona estrellada del mismo Dios— y la arrumbó en el estante; Pero el Diablo un caballero es y no lo presume.
Sus ojos deslumbran, su corazón estremece y con su mano te ataja desde lejos, Y estropea tu amor y afeita tu cabeza; pero no va a quedarse en Su pequeño lugar, Cualquiera-que-sea-su-nombre, donde la gente es rica y lista; Dorada y graciosa casa donde las cosas siempre van de mal en peor; Hay cosas que no necesitas saber, aunque vivas y mueras en vano, Hay almas más enfermas de placer de lo que él mismo está enfermo de dolor; Hay alguien que juega al Necio de Abril y toca la puerta En la que los tontos siempre permanecen y abril no llega nunca más, Y donde el esplendor de la luz del día crece aún más triste que la oscuridad, Y las caídas de la vida gustan de un buitre que alguna vez fue una alondra: Y ése es el Diablo Azul que alguna vez fue un Pájaro Azul; Pero el Diablo es un caballero y nunca su palabra honra.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 6:19 PM |
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Gilbert K. Chesterton -Femina contra mundum- |
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Femina contra mundum Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
The sun was black with judgment, and the moon Blood: but between I saw a man stand, saying: `To me at least The grass is green.
'There was no star that I forgot to fear With love and wonder. The birds have loved me'; but no answer came_ Only the thunder.
Once more the man stood, saying: `A cottage door, Wherethrough I gazed That instant as I turned —yea, I am vile; Yet my eyes blazed.
'For I had weighed the mountains in a balance, And the skies in a scale, I come to sell the stars —old lamps for new— "Old stars for sale". (...)
Femina contra mundum
El Sol era negro y juicioso, y sangrienta La Luna: pero entre ambos Apareció un hombre de pie, diciendo: "Para mí, Al menos el césped es verde.
Maravillado y con amor, ninguna estrella había Que olvidara temer; Me han amado las aves"; pero ninguna respuesta llegó. Sólo el trueno.
Una vez más, el hombre de pie decía: "Miraba fijamente A través de una puerta de la cabaña; En ese instante me voltee —sí, soy vil, me dije; Y mis ojos ardieron todavía.
"Porque ya había pesado las montañas en una balanza, Y los cielos en una báscula, Vengo a vender estrellas —lámparas viejas por nuevas— ¡Estrellas viejas que vendan!" (...)Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 6:12 PM |
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Gilbert K. Chesterton -Eternities- |
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Eternities Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
I cannot count the pebbles in the brook. Well hath He spoken: "Swear not by thy head. Thou knowest not the hairs," though He, we read, Writes that wild number in His own strange book.
I cannot count the sands or search the seas, Death cometh, and I leave so much untrod. Grant my immortal aureole, O my God, And I will name the leaves upon the trees,
In heaven I shall stand on gold and glass, Still brooding earth's arithmetic to spell; Or see the fading of the fires of hell Ere I have thanked my God for all the grass.
Eternidades
No soy capaz de contar los guijarros del arroyo. Bien, dijo Él: "No lo jure por su testa Ni por los cabellos que alisa", aunque Él, lo leímos, Inscribe ese descabellado número en Su propio extraño libro.
No puedo contar las arenas ni inventariar los mares, Muerte repentina, que tanto he desandado, Concédeme inmortal aureola, ¡oh! Dios mío, Y designaré las hojas de los árboles.
Permaneceré de pie en el cielo, sobre cristal y oro, Empollando aún la aritmética de la tierra para deletrearla; O para ver extinguirse los fuegos del infierno Después de agradecer a Dios la eternidad del césped.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 6:08 PM |
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Gilbert K. Chesterton -The mith of Arthur- |
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The myth of Arthur Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
O learned man who never learned to learn, Save to deduce, by timid steps and small, From towering smoke that fire can never burn And from tall tales that men were never tall. Say, have you thought what manner of man it is Of who men say "He could strike giants down" ? Or what strong memories over time's abyss Bore up the pomp of Camelot and the crown. And why one banner all the background fills, Beyond the pageants of so many spears, And by what witchery in the western hills A throne stands empty for a thousand years. Who hold, unheeding this immense impact, Immortal story for a mortal sin; Lest human fable touch historic fact, Chase myths like moths, and fight them with a pin. Take comfort; rest—there needs not this ado. You shall not be a myth, I promise you.
El mito de Arturo
¡Ah! hombre instruido que nunca aprendiste a aprender, Y que evitas deducir mediante pequeños y tímidos pasos, Como el elevado humo que el fuego jamás podrá consumir Y los grandes relatos de hombres que nunca fueron grandes. Di, ¿has pensado de qué clase de hombre se trata? ¿De quién dicen los hombres que "podría derribar gigantes"? O qué profundos recuerdos en el abismo del tiempo Aburren el boato de Camelot y de la corona. Y por qué un estandarte tapiza todo el fondo, Más allá de las cabalgatas de tantas lanzas, Y en virtud de qué brujería, en las colinas occidentales, Un trono ha permanecido vacío mil años. Quién sostiene, con tal desconsideración, este inmenso ardid, La historia inmortal de un pecado mortal; Menos fábula humana que hecho histórico Que mata mitos como polillas y se bate con un alfiler. Ten consuelo; lo demás no es difícil. Jamás un mito serás, te lo prometo.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 6:04 PM |
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Gilbert K. Chesterton -The convert- |
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The convert Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
After one moment when I bowed my head And the whole world turned over and came upright, And I came out where the old road shone white, Walked the ways and heard what all men said, Forests of tongues, like autumn leaves unshed, Being not unlovable but strange and light; Old riddles and new creeds, not in despite But softly, as men smile about the dead.
The sages have a hundred maps to give That trace their crawling cosmos like a tree, They rattle reason out through many a sieve That stores the sand and lets the gold go free: And all these things are less than dust to me Because my name is Lazarus and I live.
El converso
Después de un momento, cuando incliné mi cabeza El mundo todo cambió y se enderezó, Salí adonde el viejo camino brilló en su blancura, Caminé las veredas y oí lo que todos los hombres dijeron, Bosques de lenguas, como las hojas de otoño sin caer, No dignas de amar pero extrañas y ligeras; Viejos enigmas y nuevos credos, no a pesar de, Sino con sencillez, cual hombres que sonríen por un muerto.
Los sabios tienen cien mapas que ofrecer, Huella que su cosmos arrastra como un árbol, Y criban tanto su razón, igual que un tamiz Que conserva la arena y permite que el oro, libre, se vaya: Y todas estas cosas son para mí menos que el polvo Pues mi nombre es Lázaro y estoy vivo.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 6:01 PM |
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Gilbert K. Chesterton -The sword of surprise- |
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The sword of suprise Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
Sunder me from my bones, O sword of God Till they stand stark and strange as do the trees; That I whose heart goes up with the soaring woods May marvel as much at these.
Sunder me from my blood that in the dark I hear that red ancestral river run Like branching buried floods that find the sea But never see the sun.
Give me miraculous eyes to see my eyes Those rolling mirrors made alive in me Terrible crystals more incredible Than all the things they see
Sunder me from my soul, that I may see The sins like streaming wounds, the life's brave beat Till I shall save myself as I would save A stranger in the street.
La espada de la sorpresa
Separado yo de mis huesos, ¡oh!, espada de Dios, Hasta que ellos permanezcan de pie y ajenos, como los árboles; Yo, cuyo corazón sube volando hacia los bosques Y puede maravillarse tanto como ellos.
Separado yo de mi sangre que, en la oscuridad, Escucha al ancestral río correr, Y cómo los ríos subterráneos se confunden en el mar Pero nunca el sol ven.
Dame ojos milagrosos para ver mis ojos Espejos rodantes que viven en mí, Cristales terribles más increíbles Que todas las cosas que vi.
Separado yo de mi alma, que puedo ver Los pecados como heridas sangrantes, valientes golpe de vida, Hasta que a un extraño en la calle Salve como yo mismo me salvaría.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 5:30 PM |
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Gilbert K. Chesterton -The song of the strange ascetic- |
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The song of the strange ascetic Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
If I had been a Heathen, I'd have praised the purple vine, My slaves should dig the vineyards, And I would drink the wine. But Higgins is a Heathen, And his slaves grow lean and grey, That he may drink some tepid milk Exactly twice a day.
If I had been a Heathen, I'd have crowned Neaera's curls, And filled my life with love affairs, My house with dancing girls; But Higgins is a Heathen, And to lecture rooms is forced, Where his aunts, who are not married, Demand to be divorced.
If I had been a Heathen, I'd have sent my armies forth, And dragged behind my chariots The Chieftains of the North. But Higgins is a Heathen, And he drives the dreary quill, To lend the poor that funny cash That makes them poorer still.
If I had been a Heathen, I'd have piled my pyre on high, And in a great red whirlwind Gone roaring to the sky; But Higgins is a Heathen, And a richer man than I: And they put him in an oven, Just as if he were a pie.
Now who that runs can read it, The riddle that I write, Of why this poor old sinner, Should sin without delight- But I, I cannot read it (Although I run and run), Of them that do not have the faith, And will not have the fun.
Canto de la extraña ascesis
Si hubiese sido pagano, Habría ensalzado la vid purpúrea, Mis esclavos habrían labrado los viñedos Y yo bebería vino. Pero Higgins es el pagano, Y sus esclavos crecen famélicos y encanecen; Quizás él pueda beber un poco de leche tibia Unas dos veces al día.
Si hubiese sido pagano, Habría coronado los rizos de Neaera, Y colmado mi vida de aventuras amorosas Y mi casa con muchachas que bailan; Pero Higgins es el pagano, Y diserta a fuerzas en sus aposentos, Donde sus tías que no están casadas Exigen divorciarse.
Si hubiese sido pagano, Habría enviado mis ejércitos por delante, Y por la retaguardia arrastraría A los Jefes del Norte. Pero Higgins es el pagano, Y esgrime con pesar la pluma, Para prestar a los pobres dinero divertido Lo que lo hace aún más pobre.
Si hubiese sido pagano, Habría colocado mi pira en lo alto, Y un gran torbellino rojo Rugiendo se iría al cielo; Pero Higgins es el pagano, Y es más rico que yo: Pero ellos son los que lo pusieron en un horno, Como si fuera un pastel.
Ahora quien corra por ahí puede leer El enigma que escribo, De por qué este pobre viejo pecador Debe pecar sin deleite. Sin embargo yo, yo no puedo leerlo (Por más que corro y corro), Pues ellos carecen de fe Y nunca se divertirán.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 5:24 PM |
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Gilbert K. Chesterton -Wine and water- |
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Wine and water Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
Old Noah he had an ostrich farm and fowls on the largest scale, He ate his egg with a ladle in a egg-cup big as a pail, And the soup he took was Elephant Soup and fish he took was Whale, But they all were small to the cellar he took when he set out to sail, And Noah he often said to his wife when he sat down to dine, "I don't care where the water goes if it doesn't get into the wine". The cataract of the cliff of heaven fell blinding off the brink As if it would wash the stars away as suds go down a sink, The seven heavens came roaring down for the throats of hell to drink, And Noah he cocked his eye and said, "It looks like rain, I think, The water has drowned the Matterhorn as deep as a Mendip mine, But I don't care where the water goes if it doesn't get into the wine". But Noah he sinned, and we have sinned; on tipsy feet we trod, Till a great big black teetotaller was sent to us for a rod, And you can't get wine at a P.S.A., or chapel, or Eisteddfod, For the Curse of Water has come again because of the wrath of God, And water is on the Bishop's board and the Higher Thinker's shrine, But I don't care where the water goes if it doesn't get into the wine.
Agua y vino
El viejo Noé tenía una granja de avestruces y aves a gran escala, Comió su huevo —que estaba en una copa grande como cubo— con un cucharón, Y la sopa que tomó era sopa de elefante y el pescado que comió era de ballena, Pero cuando inició su travesía todos eran pequeñuelos en el sótano. Frecuentemente, cuando se sentaban a cenar, Noé decía a su esposa: "El agua sólo me importa si va al vino". Desde el precipicio celestial se desbordó la catarata y no dejaba ver, Como si lavara las estrellas, igual que la espuma bajo un fregadero, Los siete cielos, rugientes, descendieron para que bebieran los cogotes del infierno, Y Noé guiñó su ojo y dijo: "parece lluvia, creo, El agua ha inundado el Monte Cervino igual que la mina de Mendip, Pero no me importa a donde vaya el agua si no va al vino". Noé pecó, pecamos nosotros también; caminamos con pasos de embriaguez, Hasta que nos enviaron un gran abstemio negro como cetro, Y ya no se puede conseguir vino en P. S. A., en una capilla o en Eisteddfod, Y, para Maldición del Agua, de nuevo ha llegado por la ira de Dios, Y el agua está en la mesa del obispo y en el altar del Más Elevado Pensador, Pero no me importa a donde vaya el agua si no va al vino.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 5:21 PM |
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Gilbert K. Chesterton -The song of right and wrong- |
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The song of right and wrong Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
Feast on wine or fast on water And your honour shall stand sure, God Almighty's son and daughter He the valiant, she the pure; If an angel out of heaven Brings you other things to drink, Thank him for his kind attentions, Go and pour them down the sink.
Tea is like the East he grows in, A great yellow Mandarin With urbanity of manner And unconsciousness of sin; All the women, like a harem, At his pig-tail troop along; And, like all the East he grows in, He is Poison when he's strong.
Tea, although an Oriental, Is a gentleman at least; Cocoa is a cad and coward, Cocoa is a vulgar beast, Cocoa is a dull, disloyal, Lying, crawling cad and clown, And may very well be grateful To the fool that takes him down.
As for all the windy waters, They were rained like tempests down When good drink had been dishonoured By the tipplers of the town; When red wine had brought red ruin And the death-dance of our times, Heaven sent us Soda Water As a torment for our crimes.
Canción de lo acertado y lo erróneo
Fiesta en vino o fasto en agua Su honor permanecerá incólume. El hijo y la hija del Dios Omnipotente, Él, valiente, ella, pura; Si un ángel del cielo Te trajera otras cosas para beber, La agradecerías sus amables atenciones, E irías y las vaciarías bajo la sentina.
El té es como el Este que crece en él, Un gran mandarín amarillo Con reglas de urbanidad E inconsciencia del pecado; Todas las mujeres, como un harén, Como colas de cerdo en tropel; Y, como todo el Este que crece en él, Cuando se fortalece, veneno se vuelve.
Aunque oriental, el té Es un caballero al menos; El cacao es sinvergüenza y cobarde, El cacao es una bestia común, El cacao es sombrío, desleal, Allí se queda, arrastrándose el desvergonzado, Haciéndose el payaso, Y puede que le agradezca Al tonto que lo toma.
En cuanto a las aguas huracanadas, Que llovieron como tempestades Cuando deshonraron las buenas bebidas De los bebedores del pueblo; Cuando el vino tinto trajo la ruina roja Y la danza de la muerte de nuestros tiempos, El cielo nos envió Agua que Refresca Como tormento para nuestros crímenes.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 5:14 PM |
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Gilbert K. Chesterton -Gold leaves- |
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Gold leaves Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
Lo! I am come to autumn, When all the leaves are gold; Grey hairs and golden leaves cry out The year and I are old.
In youth I sought the prince of men, Captain in cosmic wars, Our Titan, even the weeds would show Defiant, to the stars.
But now a great thing in the street Seems any human nod, Where shift in strange democracy The million masks of God.
In youth I sought the golden flower Hidden in wood or wold, But I am come to autumn, When all the leaves are gold.
Hojas de oro
¡Hey! Vengo al otoño, Cuando todas las hojas de oro son; Cabellos grises y hojas doradas se lamentan Somos viejos el año y yo.
En la juventud busqué al príncipe de los hombres, Capitán de guerras cósmicas, Nuestro Titán; las cizañas se mostraban Desafiantes, incluso a las estrellas.
Hoy, cualquier cosa grandota de la calle Merece una reverencia humana, Que se trueca en extraña democracia: Millones de máscaras de Dios.
En la juventud busqué la flor dorada Escondida en bosques y hondonadas, Pero llego al otoño, Cuando las hojas todas de oro son.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:50 PM |
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Gilbert K. Chesterton -The skeleton- |
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The skeleton Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
Chattering finch and water-fly Are not merrier than I; Here among the flowers I lie Laughing everlastingly. No; I may not tell the best; Surely, friends, I might have guessed Death was but the good King's jest, It was hid so carefully.
El esqueleto
El pinzón que parlotea y la brisa No son más felices que yo; Aquí yazco entre flores Con mi eterna risa. No; para nada cómodamente; Aunque claro, amigos, por pensar de prisa No supuse la muerte, que el buen rey Ocultó como broma… cuidadosamente.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:48 PM |
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Gilbert K. Chesterton -A ballad of suicide- |
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A ballad of suicide Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
The gallows in my garden, people say, Is new and neat and adequately tall; I tie the noose on in a knowing way As one that knots his necktie for a ball; But just as all the neighbours—on the wall— Are drawing a long breath to shout "Hurray!" The strangest whim has seized me. . . . After all I think I will not hang myself to-day.
To-morrow is the time I get my pay— My uncle's sword is hanging in the hall— I see a little cloud all pink and grey— Perhaps the rector's mother will not call— I fancy that I heard from Mr. Gall That mushrooms could be cooked another way— I never read the works of Juvenal— I think I will not hang myself to-day.
The world will have another washing-day; The decadents decay; the pedants pall; And H.G. Wells has found that children play, And Bernard Shaw discovered that they squall, Rationalists are growing rational— And through thick woods one finds a stream astray So secret that the very sky seems small— I think I will not hang myself to-day.
Envoi Prince, I can hear the trumpet of Germinal, The tumbrils toiling up the terrible way;
Even to-day your royal head may fall, I think I will not hang myself to-day
La balada del suicida
De la horca en mi jardín, dice la gente Que es nueva, limpia y de altura decente Me pongo el nudo al cuello de una forma estudiada, Como una pajarita para una culta velada. Pero mientras los vecinos al muro asomados, contienen el aliento para aplaudir preparados. El más extraño capricho me ha llegado a atrapar Y creo que después de todo, hoy no me pienso ahorcar
Mañana el sueldo he de cobrar... La espada de mi tío no llegué a descolgar... Veo una nube pequeña y rosada. Quizás la madre del rector no haga esa llamada... Me parece que el Sr.Gall va a contestar ... Estos hongos de otra forma se pueden cocinar ... Las obras de Juvenal aún he de terminar... Hoy no me pienso ahorcar.
El mundo su ropa sucia volverá a lavar. Los decadentes han de empeorar, los pedantes se han de aburrir. Y H.G.Wells ha visto a los niños reír y Bernard Shaw los ha visto llorar El racionalismo es cada vez más racional Y por lo más profundo del bosque he visto un arroyo fluir tan secreto que al propio cielo llega a ocultar... Hoy no me pienso ahorcar.
Mensajero Príncipe, los clarines de Germinal oigo sonar Y a los carros de guerra en su terrible camino retumbar. Incluso hoy, tu real cabeza podría rodar ... Hoy no me pienso ahorcar.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:44 PM |
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Gilbert K. Chesterton -Lepanto- |
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Lepanto Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
White founts falling in the Courts of the sun, And the Soldan of Byzantium is smiling as they run; There is laughter like the fountains in that face of all men feared, It stirs the forest darkness, the darkness of his beard; It curls the blood-red crescent, the crescent of his lips; For the inmost sea of all the earth is shaken with his ships. They have dared the white republics up the capes of Italy, They have dashed the Adriatic round the Lion of the Sea, And the Pope has cast his arms abroad for agony and loss, And called the kings of Christendom for swords about the Cross. The cold queen of England is looking in the glass; The shadow of the Valois is yawning at the Mass; From evening isles fantastical rings faint the Spanish gun, And the Lord upon the Golden Horn is laughing in the sun. Dim drums throbbing, in the hills half heard, Where only on a nameless throne a crownless prince has stirred, Where, risen from a doubtful seat and half attainted stall, The last knight of Europe takes weapons from the wall, The last and lingering troubadour to whom the bird has sung, That once went singing southward when all the world was young. In that enormous silence, tiny and unafraid, Comes up along a winding road the noise of the Crusade. Strong gongs groaning as the guns boom far, Don John of Austria is going to the war, Stiff flags straining in the night-blasts cold In the gloom black-purple, in the glint old-gold, Torchlight crimson on the copper kettle-drums, Then the tuckets, then the trumpets, then the cannon, and he comes.
Don John laughing in the brave beard curled, Spurning of his stirrups like the thrones of all the world, Holding his head up for a flag of all the free. Love-light of Spain--hurrah! Death-light of Africa! Don John of Austria Is riding to the sea.
Mahound is in his paradise above the evening star, (Don John of Austria is going to the war.) He moves a mighty turban on the timeless houri's knees, His turban that is woven of the sunsets and the seas. He shakes the peacock gardens as he rises from his ease, And he strides among the tree-tops and is taller than the trees; And his voice through all the garden is a thunder sent to bring Black Azrael and Ariel and Ammon on the wing. Giants and the Genii, Multiplex of wing and eye, Whose strong obedience broke the sky When Solomon was king. They rush in red and purple from the red clouds of the morn, From the temples where the yellow gods shut up their eyes in scorn; They rise in green robes roaring from the green hells of the sea Where fallen skies and evil hues and eyeless creatures be, On them the sea-valves cluster and the grey sea-forests curl, Splashed with a splendid sickness, the sickness of the pearl; They swell in sapphire smoke out of the blue cracks of the ground,-- They gather and they wonder and give worship to Mahound. And he saith, "Break up the mountains where the hermit-folk can hide, And sift the red and silver sands lest bone of saint abide, And chase the Giaours flying night and day, not giving rest, For that which was our trouble comes again out of the west. We have set the seal of Solomon on all things under sun, Of knowledge and of sorrow and endurance of things done. But a noise is in the mountains, in the mountains, and I know The voice that shook our palaces--four hundred years ago: It is he that saith not 'Kismet'; it is he that knows not Fate; It is Richard, it is Raymond, it is Godfrey at the gate! It is he whose loss is laughter when he counts the wager worth, Put down your feet upon him, that our peace be on the earth." For he heard drums groaning and he heard guns jar, (Don John of Austria is going to the war.) Sudden and still--hurrah! Bolt from Iberia! Don John of Austria Is gone by Alcalar.
St. Michaels on his Mountain in the sea-roads of the north (Don John of Austria is girt and going forth.) Where the grey seas glitter and the sharp tides shift And the sea-folk labour and the red sails lift. He shakes his lance of iron and he claps his wings of stone; The noise is gone through Normandy; the noise is gone alone; The North is full of tangled things and texts and aching eyes, And dead is all the innocence of anger and surprise, And Christian killeth Christian in a narrow dusty room, And Christian dreadeth Christ that hath a newer face of doom, And Christian hateth Mary that God kissed in Galilee,-- But Don John of Austria is riding to the sea. Don John calling through the blast and the eclipse Crying with the trumpet, with the trumpet of his lips, Trumpet that sayeth ha! Domino gloria! Don John of Austria Is shouting to the ships.
King Philip's in his closet with the Fleece about his neck (Don John of Austria is armed upon the deck.) The walls are hung with velvet that is black and soft as sin, And little dwarfs creep out of it and little dwarfs creep in. He holds a crystal phial that has colours like the moon, He touches, and it tingles, and he trembles very soon, And his face is as a fungus of a leprous white and grey Like plants in the high houses that are shuttered from the day, And death is in the phial and the end of noble work, But Don John of Austria has fired upon the Turk. Don John's hunting, and his hounds have bayed-- Booms away past Italy the rumour of his raid. Gun upon gun, ha! ha! Gun upon gun, hurrah! Don John of Austria Has loosed the cannonade.
The Pope was in his chapel before day or battle broke, (Don John of Austria is hidden in the smoke.) The hidden room in man's house where God sits all the year, The secret window whence the world looks small and very dear. He sees as in a mirror on the monstrous twilight sea The crescent of his cruel ships whose name is mystery; They fling great shadows foe-wards, making Cross and Castle dark, They veil the plumèd lions on the galleys of St. Mark; And above the ships are palaces of brown, black-bearded chiefs, And below the ships are prisons, where with multitudinous griefs, Christian captives sick and sunless, all a labouring race repines Like a race in sunken cities, like a nation in the mines. They are lost like slaves that sweat, and in the skies of morning hung The stair-ways of the tallest gods when tyranny was young. They are countless, voiceless, hopeless as those fallen or fleeing on Before the high Kings' horses in the granite of Babylon. And many a one grows witless in his quiet room in hell Where a yellow face looks inward through the lattice of his cell, And he finds his God forgotten, and he seeks no more a sign-- (But Don John of Austria has burst the battle-line!)
Don John pounding from the slaughter-painted poop, Purpling all the ocean like a bloody pirate's sloop, Scarlet running over on the silvers and the golds, Breaking of the hatches up and bursting of the holds, Thronging of the thousands up that labour under sea White for bliss and blind for sun and stunned for liberty. Vivat Hispania! Domino Gloria! Don John of Austria Has set his people free!
Cervantes on his galley sets the sword back in the sheath (Don John of Austria rides homeward with a wreath.) And he sees across a weary land a straggling road in Spain, Up which a lean and foolish knight for ever rides in vain, And he smiles, but not as Sultans smile, and settles back the blade.... (But Don John of Austria rides home from the Crusade.)
Lepanto
ChestertonBlancos los surtidores en los patios del sol; El Sultán de Estambul se ríe mientras juegan. Como las fuentes es la risa de esa cara que todos temen, Y agita la boscosa oscuridad, la oscuridad de su barba, Y enarca la media luna sangrienta, la media luna de sus labios, Porque al más íntimo de los mares del mundo lo sacuden sus barcos. Han desafiado las repúblicas blancas por los cabos de Italia, Han arrojado sobre el León del Mar el Adriático, Y la agonía y la perdición abrieron los brazos del Papa, Que pide espadas a los reyes cristianos para rodear la Cruz. La fría Reina de Inglaterra se mira en el espejo; La sombra de los Valois bosteza en la Misa; De las irreales islas del ocaso retumban los cañones de España, Y el Señor del Cuerno de Oro se está riendo en pleno sol. Laten vagos tambores, amortiguados por las montañas, Y sólo un príncipe sin corona, se ha movido en un trono sin nombre, Y abandonando su dudoso trono e infamado sitial, El último caballero de Europa toma las armas, El último rezagado trovador que oyó el canto del pájaro, Que otrora fue cantando hacia el sur, cuando el mundo entero era joven. En ese vasto silencio, diminuto y sin miedo Sube por la senda sinuosa el ruido de la Cruzada. Mugen los fuertes gongs y los cañones retumban, Don Juan de Austria se va a la guerra. Forcejean tiesas banderas en las frías ráfagas de la noche, Oscura púrpura en la sombra, oro viejo en la luz, Carmesí de las antorchas en los atabales de cobre. Las clarinadas, los clarines, los cañones y aquí está él.
Ríe Don Juan en la gallarda barba rizada. Rechaza, estribando fuerte, todos los tronos del mundo, Yergue la cabeza como bandera de los libres. Luz de amor para España ¡hurrá! Luz de muerte para África ¡hurrá! Don Juan de Austria Cabalga hacia el mar.
Mahoma está en su paraíso sobre la estrella de la tarde (Don Juan de Austria va a la guerra.) Mueve el enorme turbante en el regazo de la hurí inmortal, Su turbante que tejieron los mares y los ponientes. Sacude los jardines de pavos reales al despertar de la siesta, Y camina entre los árboles y es más alto que los árboles, Y a través de todo el jardín la voz es un trueno que llama A Azrael el Negro y a Ariel y al vuelo de Ammon: Genios y Gigantes, Múltiples de alas y de ojos, Cuya fuerte obediencia partió el cielo Cuando Salomón era rey. Desde las rojas nubes de la mañana, en rojo y en morado se precipitan, Desde los templos donde cierran los ojos los desdeñosos dioses amarillos; Ataviados de verde suben rugiendo de los infiernos verdes del mar Donde hay cielos caídos, y colores malvados y seres sin ojos; Sobre ellos se amontonan los moluscos y se encrespan los bosques grises del mar, Salpicados de una espléndida enfermedad, la enfermedad de la perla; Surgen en humaredas de zafiro por las azules grietas del suelo,- Se agolpan y se maravillan y rinden culto a Mahoma. Y él dice: Haced pedazos los montes donde los ermitaños se ocultan, Y cernid las arenas blancas y rojas para que no quede un hueso de santo Y no déis tregua a los rumíes de día ni de noche, Pues aquello que fue nuestra aflicción vuelve del Occidente. Hemos puesto el sello de Salomón en todas las cosas bajo el sol De sabiduría y de pena y de sufrimiento de lo consumado, Pero hay un ruido en las montañas, en las montañas y reconozco La voz que sacudió nuestros palacios -hace ya cuatro siglos: ¡Es el que no dice "Kismet"; es el que no conoce el Destino, Es Ricardo, es Raimundo, es Godofredo que llama! Es aquel que arriesga y que pierde y que se ríe cuando pierde; Ponedlo bajo vuestros pies, para que sea nuestra paz en la tierra. Porque oyó redoblar de tambores y trepidar de cañones. (Don Juan de Austria va a la guerra) Callado y brusco -¡hurrá! Rayo de Iberia Don Juan de Austria Sale de Alcalá.
En los caminos marineros del norte, San Miguel está en su montaña. (Don Juan de Austria, pertrechado, ya parte) Donde los mares grises relumbran y las filosas marcas se cortan Y los hombres del mar trabajan y las rojas velas se van. Blande su lanza de hierro, bate sus alas de piedra; El fragor atraviesa la Normandía; el fragor está solo; Llenan el Norte cosas enredadas y textos y doloridos ojos Y ha muerto la inocencia de la ira y de la sorpresa, Y el cristiano mata al cristiano en un cuarto encerrado Y el cristiano teme a Jesús que lo mira con otra cara fatal Y el cristiano abomina de María que Dios besó en Galilea. Pero Don Juan de Austria va cabalgando hacia el mar, Don Juan que grita bajo la fulminación y el eclipse, Que grita con la trompeta, con la trompeta de sus labios, Trompeta que dice ¡ah! ¡Domino Gloria! Don Juan de Austria Les está gritando a las naves.
El rey Felipe está en su celda con el Toisón al cuello (Don Juan de Austria está armado en la cubierta) Terciopelo negro y blando como el pecado tapiza los muros Y hay enanos que se asoman y hay enanos que se escurren. Tiene en la mano un pomo de cristal con los colores de la luna, Lo toca y vibra y se echa a temblar Y su cara es como un hongo de un blanco leproso y gris Como plantas de una casa donde no entra la luz del día, Y en ese filtro está la muerte y el fin de todo noble esfuerzo, Pero Don Juan de Austria ha disparado sobre el turco. Don Juan está de caza y han ladrado sus lebreles- El rumor de su asalto recorre la tierra de Italia. Cañón sobre cañón, ¡ah, ah! Cañón sobre cañón, ¡hurrá! Don Juan de Austria Ha desatado el cañoneo.
En su capilla estaba el Papa antes que el día o la batalla rompieran. (Don Juan está invisible en el humo) En aquel oculto aposento donde Dios mora todo el año, Ante la ventana por donde el mundo parece pequeño y precioso. Ve como en un espejo en el monstruoso mar del crepúsculo La media luna de las crueles naves cuyo nombre es misterio. Sus vastas sombras caen sobre el enemigo y oscurecen la Cruz y el Castillo Y velan los altos leones alados en las galeras de San Marcos; Y sobre los navíos hay palacios de morenos emires de barba negra; Y bajo los navíos hay prisiones, donde con innumerables dolores, Gimen enfermos y sin sol los cautivos cristianos Como una raza de ciudades hundidas, como una nación en las ruinas, Son como los esclavos rendidos que en el cielo de la mañana Escalonaron pirámides para dioses cuando la opresión era joven; Son incontables, mudos, desesperados como los que han caído o los que huyen De los altos caballos de los Reyes en la piedra de Babilonia. Y más de uno se ha enloquecido en su tranquila pieza del infierno Donde por la ventana de su celda una amarilla cara lo espía, Y no se acuerda de su Dios, y no espera un signo- (¡Pero Don Juan de Austria ha roto la línea de batalla!)
Cañonea Don Juan desde el puente pintado de matanza. Enrojece todo el océano como la ensangrentada chalupa de un pirata, El rojo corre sobre la plata y el oro. Rompen las escotillas y abren las bodegas, Surgen los miles que bajo el mar se afanaban Blancos de dicha y ciegos de sol y alelados de libertad. ¡Vivat Hispania! ¡Domino Gloria! ¡Don Juan de AustriaHa dado libertad a su pueblo!
Cervantes en su galera envaina la espada (Don Juan de Austria regresa con un lauro) Y ve sobre una tierra fatigada un camino roto en España, Por el que eternamente cabalga en vano un insensato caballero flaco, Y sonríe (pero no como los Sultanes), y envaina el acero... (Pero Don Juan de Austria vuelve de la Cruzada.)
Versión de Jorge Luis BorgesLabels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:27 PM |
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Gilbert K. Chesterton -Gloria in profundis- |
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Gloria in profundis Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
There has fallen on earth for a token A god too great for the sky. He has burst out of all things and broken The bounds of eternity: Into time and the terminal land He has strayed like a thief or a lover, For the wine of the world brims over, Its splendour is split on the sand.
Who is proud when the heavens are humble, Who mounts if the mountains fall, If the fixed stars topple and tumble And a deluge of love drowns all- Who rears up his head for a crown, Who holds up his will for a warrant, Who strives with the starry torrent, When all that is good goes down?
For in dread of such falling and failing The fallen angels fell Inverted in insolence, scaling The hanging mountain of hell: But unmeasured of plummet and rod Too deep for their sight to scan, Outrushing the fall of man Is the height of the fall of God.
Glory to God in the Lowest The spout of the stars in spate- Where thunderbolt thinks to be slowest And the lightning fears to be late: As men dive for sunken gem Pursuing, we hunt and hound it, The fallen star has found it In the cavern of Bethlehem.
Gloria in profundis
Ha caído sobre la tierra por una moneda Un dios muy bueno para las estrellas. El ha estallado fuera de todas las cosas y roto Los limites de la eternidad: Dentro del tiempo y la tierra terminal El se ha estrellado como un ladrón o un amante Por el vino del mundo se desborde, Su esplendor esta dividido en la arena
¿Quien es orgulloso cuando los cielos están humildes? ¿Quién monta si las montañas se caen? Si las firmes estrellas se vuelcan y caen? Y un desborde de amor los ahogue a todos- ¿Quién levantara en alto su cabeza por una corona? ¿Quién sostendrá su voluntad por un mandato? ¿Quién luchara con el destellante torrente? ¿Cuando todo lo que es bueno se va para abajo?
Por preocuparse por semejante caída y fracaso Los caídos ángeles sienten Invertidos en insolencia, escalando La colgante montaña del infierno: Pero sin medir la caída y vara Muy profundo para que sus sentidos puedan escudriñar Apurando la caída del hombre Es la cumbre de la caída de Dios
Gloria a Dios en lo Profundo El chorro de las estrellas está fluyendo Donde el rayo piensa ser lento Y el relámpago teme llegar atrasado: Como el hombre se zabulle por la sumergida gema Persiguiendo, la cazamos y acosamos La estrella caída lo ha encontrado En la caverna de Belén
Versión de Domingo PortalesLabels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 5:09 AM |
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Gilbert K. Chesterton -The ballad of the white horse- |
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The ballad of the white horse Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
(...) The gates of heaven are lightly locked, We do not guard our gold, Men may uproot where worlds begin, Or read the name of the nameless sin; But if he fail or if he win To no good man is told.
"The men of the East may spell the stars, And times and triumphs mark, But the men signed of the cross of Christ Go gaily in the dark.
"The men of the East may search the scrolls For sure fates and fame, But the men that drink the blood of God Go singing to their shame.
"The wise men know what wicked things Are written on the sky, They trim sad lamps, they touch sad strings, Hearing the heavy purple wings, Where the forgotten seraph kings Still plot how God shall die.
"The wise men know all evil things Under the twisted trees, Where the perverse in pleasure pine And men are weary of green wine And sick of crimson seas.
"But you and all the kind of Christ Are ignorant and brave, And you have wars you hardly win And souls you hardly save.
"I tell you naught for your comfort, Yea, naught for your desire, Save that the sky grows darker yet And the sea rises higher.
"Night shall be thrice night over you, And heaven an iron cope. Do you have joy without a cause, Yea, faith without a hope?" (...)
La balada del caballo blanco
Levemente se cierran las puertas del cielo, Y no guardamos nuestro oro, Los hombres se desarraigan donde comienzan los mundos, Leen el nombre del pecado anónimo; Ganen o pierdan, A ningún hombre se le dice.
Los hombres de Oriente deletrear pueden las estrellas, Y señalan las horas y los triunfos, Pero los hombres suscribieron la cruz de Cristo Y marchan alegremente a la oscuridad...
Cosas malas saben los sabios que están escritas en el cielo Reparan lámparas tristes, tañen melancólicas cuerdas, Y escuchan pesadas alas púrpuras, Donde los seráficos reyes olvidados Aún planean la muerte de Dios...
Pero tú y toda la bondad de Cristo Son ignorantes y arrojadas, Y tienes guerras que apenas ganarás Y almas que apenas salvarás.
No digo nada para tu consuelo, Sí, nada para complacer tu deseo, A menos que el cielo se oscurezca aún más, Y el mar suba más alto.
La noche lo será tres veces sobre ti, Y el cielo, hierro encapotado. ¿Acaso tienes alegría sin causa, sí, fe sin esperanza? (...)Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:54 AM |
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Gilbert K. Chesterton -The donkey- |
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The donkey Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
When fishes flew and forests walked And figs grew upon thorn, Some moment when the moon was blood Then surely I was born.
With monstrous head and sickening cry And ears like errant wings, The devil's walking parody On all four-footed things.
The tattered outlaw of the earth, Of ancient crooked will; Starve, scourge, deride me: I am dumb, I keep my secret still.
Fools! For I also had my hour; One far fierce hour and sweet: There was a shout about my ears, And palms before my feet.
El burro
Cuando los peces vuelan y los bosques caminan Y los higos crecen de espinas En algún momento, cuando la luna era sangre que vi Seguramente entonces yo nací.
Con cabeza monstruosa y enfermo lamento Y orejas como alas errantes, Parodia del diablo andante, Sobre cuatro patas, algo mendicante.
El andrajoso marginado de la tierra, De antiguo y falso testamento; Hambreado, azotado, denigrado: yo soy mudo, Y mi secreto aún guardo.
¡Tontos! Yo también tenía mi hora; Una hora dulce y feroz: Un grito golpea mis orejas, Y las palmas se tienden a mis pies.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:51 AM |
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Gilbert K. Chesterton -A little litany- |
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A little litany Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
When God turned back eternity and was young, Ancient of Days, grown little for your mirth (As under the low arch the land is bright) Peered through you, gate of heaven —and saw the earth.
Or shutting out his shining skies awhile Built you about him for a house of gold To see in pictured walls his storied world Return upon him as a tale is told.
Or found his mirror there; the only glass That would not break with that unbearable light Till in a corner of the high dark house God looked on God, as ghosts meet in the night.
Star of his morning; that unfallen star In that strange starry overturn of space When earth and sky changed places for an hour And heaven looked upwards in a human face.
Or young on your strong knees and lifted up Wisdom cried out, whose voice is in the street, And more than twilight of twiformed cherubim Made of his throne indeed a mercy-seat.
Or risen from play at your pale raiment's hem God, grown adventurous from all time's repose, Or your tall body climed the ivory tower And kissed upon your mouth the mystic rose.
Una pequeña letanía
Cuando Dios se salió de la eternidad y joven fue, Antiguos días, creció un poco para su propia alegría (Como bajo el horizonte es luminosa la tierra) Y a través suyo me asomé, puerta de cielo —y vio la tierra.
Acallando por un momento sus brillantes cielos Construyó cerca de él una casa de oro Para en paredes imaginarias ver su acontecido mundo Y a él regresar como quien dice un cuento.
Allí encontró su espejo; el único vidrio Que no se rompería con tan insufrible luz Hasta que en una esquina de la alta casa oscura Dios se parecía a Dios, Cual fantasmas que en la noche se saludan.
La estrella de la mañana, esa estrella no caída En ese extraño vuelco estrellado del espacio Cuando tierra y cielo intercambiaron su lugares por una hora Y el cielo parecía más de rostro humano.
Joven, sobre sus fuertes rodillas se levantó, La sabiduría, cuya voz está en la calle, lloró Más que el crepúsculo del biforme querubín Que hizo de su trono un misericordioso asiento.
De tu pálido dobladillo del hábito, surgido de la escena, Dios crece venturoso del reposo de todo el tiempo, Tu alto cuerpo la torre de marfil toca Y la rosa mística besa tu boca.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:32 AM |
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Gilbert K. Chesterton -Antichrist or the reunion of christendom: an ode- |
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Antichrist or the reunion of christendom: an ode Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
A Bill which has shocked the conscience of every Christian community in Europe.
Mr. F. E. Smith, on the Welsh Disestablishment Bill
Are they clinging to their crosses, F. E. Smith, Where the Breton boat-fleet tosses, Are they, Smith? Do they, fasting, trembling, bleeding, Wait the news from this our city? Groaning "That's the Second Reading!" Hissing "There is still Committee!" If the voice of Cecil falters, If McKenna's point has pith, Do they tremble for their altars? Do they, Smith?
Russian peasants round their pope Huddled, Smith, Hear about it all, I hope, Don't they, Smith? In the mountain hamlets clothing Peaks beyond Caucasian pales, Where Establishment means nothing And they never heard of Wales, Do they read it all in Hansard _ With a crib to read it with _ "Welsh Tithes: Dr. Clifford answered." Really, Smith?
In the lands where Christians were, F. E. Smith, In the little lands laid bare, Smith, O Smith! Where the Turkish bands are busy And the Tory name is blessed
Since they hailed the Cross of Dizzy On the banners from the West! Men don't think it half so hard if Islam burns their kin and kith, Since a curate lives in Cardiff Saved by Smith.
It would greatly, I must own, Soothe me, Smith! If you left this theme alone, Holy Smith! For your legal cause or civil You fight well and get your fee; For your God or dream or devil You will answer, not to me. Talk about the pews and steeples And the cash that goes therewith! But the souls of Christian peoples... Chuck it, Smith!
El anticristo o el conciliábulo cristiano: una oda
A Bill, quien ha azuzado la conciencia de cada comunidad cristiana en Europa
F. E. Smith, en el Welsh Disestablishment Bill
Mientras se aferran a sus cruces, F. E. Smith, Donde se botan las veloces flotas bretonas, ¿Son ellos, Smith? ¿Acaso esperan las noticias de nuestra ciudad Ayunando, temblando, sangrando? Exclamando: "¡Esa es la Segunda Lectura!" Musitando: "¡Todavía existe el Comité!" Si vacila la voz de Cecil, Si McKenna pone el dedo en la llaga, ¿Se estremecen en sus altares? ¿Hacen eso, Smith?
Los campesinos rusos rodean a su patriarca, Se agrupan, Smith, Escucho hablar de eso, creo, ¿No es así, Smith? En el paisaje de las aldeas montañesas, En los picos más allá del pálido Cáucaso, Donde el Establishment nada significa Y nunca han oído hablar de Gales, Leyeron todos en Hansard —con pesebre y todo— "Diezmos galeses: respondió el Dr. Clifford". ¿Fue eso realidad Smith?
En las tierras donde había cristianos, F. E. Smith, Pequeñas tierras desnudas, ¡Smith, ah, Smith! En donde están muy ocupadas las bandas turcas, Y el conservador nombre Tory es bendecido
¡Y saludan a la Desvanecida Cruz De los estandartes del Occidente! Los hombres no pensarían que fuera medio difícil Si el Islam prendiera fuego a su pariente y amigo, Pues en Cardiff vive un cura Por Smith patrocinado.
Yo también, en mayor medida, algo debería poseer. ¡Alívieme, Smith! Si tan solo usted abandonara este tema, ¡Santo Smith! Por causa legal o civil. Usted porfía bien y consigue su tajada; Deberá responder A su Dios, a su sueño o a su diablo, Pero no a mí. Hable sobre asientos de iglesia y campanarios, ¡Y también del dinero constante y sonante Que desde aquí vuela! Pero las almas de los cristianos... Eso ¡déjelo, Smith!Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:20 AM |
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Gilbert K. Chesterton -To Hilaire Belloc- |
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To Hilaire Belloc Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
For every tiny town or place God made the stars especially; Babies look up with owlish face And see them tangled in a tree; You saw a moon from Sussex Downs, A Sussex moon, untravelled still, I saw a moon that was the town's, The largest lamp on Campden Hill.
Yea; Heaven is everywhere at home The big blue cap that always fits, And so it is (be calm; they come To goal at last, my wandering wits), So is it with the heroic thing; This shall not end for the world's end And though the sullen engines swing, Be you not much afraid, my friend.
This did not end by Nelson's urn Where an immortal England sits— Nor where your tall young men in turn Drank death like wine at Austerlitz. And when the pedants bade us mark What cold mechanic happenings Must come; our souls said in the dark, "Belike; but there are likelier things".
Likelier across these flats afar These sulky levels smooth and free The drums shall crash a waltz of war And Death shall dance with Liberty; Likelier the barricades shall blare Slaughter below and smoke above, And death and hate and hell declare That men have found a thing to love.
Far from your sunny uplands se I saw the dream; the streets I trod The lit straight streets shot out and met The starry streets that point to God. This legend of an epic hour A child I dreamed, and dream it still, Under the great grey water-tower That strikes the stars on Campden Hill.
A Hilaire Belloc
Dios hizo las estrellas especialmente Para cada diminuto pueblo o lugar; Extasiados, los bebés las miran Y las ven enredadas en un árbol; Desde los Downs de Sussex, una Luna viste, Una Luna de Sussex que no viaja todavía. Yo vi una Luna citadina, La farola más grande en Campden Hill.
Sí, en su casa el cielo está por doquier, La gran bóveda azul que siempre se ajusta, Y así sucede (no te inquietes; ya llegan a su meta, Por fin, mis divagaciones), Y lo mismo ocurre con todo lo heroico, Que no se acabará con el fin del mundo Y aunque se agiten las tétricas máquinas, No te asustes demasiado, amigo mío.
Esto no acabó ante la urna de Nelson, Donde se asienta una Inglaterra inmortal, Ni cuando los altos jóvenes, uno a uno, Bebieron la muerte, cual vino, en Austerlitz. Tampoco cuando los pedantes nos pidieron una señal De los fríos y mecánicos acontecimientos Por venir; en la oscuridad, nuestras almas dijeron, "Quizá, pero hay cosas más probables".
Es más probable que en estos prados lejanos, En esos llanos libres y ondulados Los tambores toquen un vals de guerra Y la Muerte baile con la Libertad; Es más probable que se levanten barricadas Con la muerte por debajo y el humo por encima, Y la muerte, el odio y el infierno declaren Que los hombres han encontrado algo para amar.
Lejos de tus montañas soleadas Vi el sueño, las calles que pisé Las calles rectas y claras que se unen Las calles estrelladas que apuntan a Dios. La leyenda de una hora épica Un niño que soñé y que sueño aún, Bajo una gris e inmensa torre de agua Que enciende las estrellas en Campden Hill.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:14 AM |
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Gilbert K. Chesterton -The last hero- |
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The last hero Gilbert Keith Chesterton (Gran Bretaña, 1874-1936)
The wind blew out from Bergen from the dawning to the day, There was a wreck of trees and fall of towers a score of miles away, And drifted like a livid leaf I go before its tide, Spewed out of house and stable, beggared of flag and bride. The heavens are bowed about my head, shouting like seraph wars, With rains that might put out the sun and clean the sky of stars, Rains like the fall of ruined seas from secret worlds above, The roaring of the rains of God none but the lonely love. Feast in my hall, O foemen, and eat and drink and drain, You never loved the sun in heaven as I have loved the rain.
The chance of battle changes —so may all battle be; I stole my lady bride from them, they stole her back from me. I rent her from her red-roofed hall, I rode and saw arise, More lovely than the living flowers the hatred in her eyes. She never loved me, never bent, never was less divine; The sunset never loved me, the wind was never mine. Was it all nothing that she stood imperial in duresse? Silence itself made softer with the sweeping of her dress.
O you who drain the cup of life, O you who wear the crown, You never loved a woman's smile as I have loved her frown. The wind blew out from Bergen to the dawning of the day, They ride and run with fifty spears to break and bar my way, I shall not die alone, alone, but kin to all the powers, As merry as the ancient sun and fighting like the flowers. How white their steel, how bright their eyes! I love each laughing knave, Cry high and bid him welcome to the banquet of the brave. Yea, I will bless them as they bend and love them where they lie, When on their skulls the sword I swing falls shattering from the sky. The hour when death is like a light and blood is like a rose, You never loved your friends, my friends, as I shall love my foes. Know you what earth shall lose to-night, what rich uncounted loans, What heavy gold of tales untold you bury with my bones? My loves in deep dim meadows, my ships that rode at ease, Ruffling the purple plumage of strange and secret seas. To see this fair earth as it is to me alone was given, The blow that breaks my brow to-night shall break the dome of heaven. The skies I saw, the trees I saw after no eyes shall see, To-night I die the death of God; the stars shall die with me; One sound shall sunder all the spears and break the trumpet's breath: You never laughed in all your life as I shall laugh in death.
El último héroe
El viento soplaba desde Bergen al amanecer el día, Chocaban los árboles y a miles de millas las torres caían, Y trémula flotaba la hoja a la que yo anticipaba su vaivén, Vomitada fuera de la casa y del establo, bandera y novia mendiga. Los cielos se arquean sobre mi cabeza, gritando cual guerra de serafines, Con lluvias que podrían barrer el Sol y limpiar el cielo de estrellas, Lluvias como la caída de ruinosos mares de secretos mundos superiores; Nadie, sólo el amor, el rugido de las lluvias de Dios. Fiesta en mi salón, ¡ah, mis enemigos!, coman, beban y extenúense, Nunca han amado el Sol en el cielo como yo he amado la lluvia.
La oportunidad en las batallas cambia —como veleidosa es cualquier batalla; De allí rapté a mi novia, y ellos me la volvieron a quitar. Y le alquilé el salón de alfombra roja, cabalgué y la vi incorporarse, Más encantadora que las flores vivientes que habitaban sus ojos. Ella nunca me amó, nunca se doblegó, nunca fue menos divina; El ocaso tampoco me amó, y el viento jamás fue mío. ¿Y así por nada ella imperialmente resistía? El silencio mismo se atenuaba con el abanicar de su vestido. Tú, que vacías la copa de la vida, tú que portas la corona, Nunca has amado la sonrisa de una mujer como yo he amado su ceño. El viento soplaba desde Bergen al amanecer el día, Cabalgaba y corría con cincuenta lanzas para destruir y obstruir mi camino, No me moriré solo pero, emparentado a todos los poderes, Estaré tan alegre como el Sol antiguo, luchando igual que las flores. ¡Cuán blanco es su acero, cuán luminosos sus ojos! Amo a cada risueño bribón; Llora fuerte y dale la bienvenido al banquete del valiente. Sí, yo los bendeciré cuando se dobleguen y los amaré en donde queden, Cuando se estrelle en sus cráneos la espada que esgrimo cayendo desde el cielo. Hora en que la muerte es como una luz y la sangre como una rosa.. Nunca amaste a tus amigos, a mis amigos, como yo amaré a mis enemigos.
¿Sabes qué tierra se perderá esta noche, qué rico descontará sus préstamos, Qué pesado oro de inefables cuentos se enterrará con mis huesos? Mis amores en los profundos prados oscuros, mis naves que surcaron a gusto, Serpenteando el plumaje púrpura de mares secretos y desconocidos. Para poder ver esta tierra como solo a mí se me dio, El soplo que quiebra mi frente esta noche romperá el domo de cielo. Los cielos que vi, los árboles que contemplé y que ningún otro ojo verá, Esta noche yo muero la muerte de Dios; las estrellas morirán conmigo; Un sonido debe apartar todas las lanzas e interrumpir el viento de la trompeta: Nunca te reíste en tu vida toda como yo lo haré en la muerte.Labels: Gilbert K. Chesterton |
posted by Alfil @ 4:01 AM |
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