W.H. Auden -As I walked out one evening- |
Tuesday, May 02, 2006 |
As I walked out one evening W.H. Auden (1907-1973)
As I walked out one evening, Walking down Bristol Street, The crowds upon the pavement Were fields of harvest wheat.
And down by the brimming river I heard a lover sing Under an arch of the railway: "Love has no ending."
I'll love you, dear, I'll love you Till China and Africa meet, And the river jumps over the mountain And the salmon sing in the street,"
I'll love you till the ocean Is folded and hung up to dry And the seven stars go squawking Like geese about the sky.
"The years shall run like rabbits, For in my arms I hold The Flower of the Ages, And the first love of the world."
But all the clocks in the city Began to whirr and chime: "O let not Time deceive you, You cannot conquer Time."
In the burrows of the Nightmare Where Justice naked is, Time watches from the shadow And coughs when you would kiss.
"In headaches and in worry Vaguely life leaks away, And Time will have his fancy To-morrow or to-day."
Into many a green valley Drifts the appalling snow; Time breaks the threaded dances And the diver's brilliant bow.
"O plunge your hands in water, Plunge them in up to the wrist; Stare, stare in the basin And wonder what you've missed."
The glacier knocks in the cupboard, The desert sighs in the bed, And the crack in the tea-cup opens A lane to the land of the dead.
"Where the beggars raffle the banknotes And the Giant is enchanting to Jack, And the Lily-white Boy is a Roarer, And Jill goes down on her back."
O look, look in the mirror? O look in your distress: Life remains a blessing Although you cannot bless.
"O stand, stand at the window As the tears scald and start; You shall love your crooked neighbour With your crooked heart."
It was late, late in the evening, The lovers they were gone; The clocks had ceased their chiming, And the deep river ran on.
Mientras paseaba una tarde
Mientras paseaba una tarde, bajando por Bristol Street, las multitudes en las aceras eran campos de trigo maduro.
Y junto al río crecido oí cantar a un enamorado bajo la vía del tren: “El amor nunca se agota."
Yo siempre te voy a querer, hasta que China y África se junten, y el río salte encima de la montaña y el salmón cante en la calle.
Te querré hasta que tiendan el océano para que se seque y las siete estrellas graznen en el cielo como gansos.
"Los años correrán como liebres porque en mis brazos llevo la Flor de los Tiempos y el primer amor del mundo”.
Pero los relojes de la ciudad empezaron a zumbar: “No dejéis que el Tiempo os engañe, nunca lo vais a vencer".
En las madrigueras de la Pesadilla donde la Justicia está desnuda, el Tiempo vigila desde la sombra y tose cuando intentáis besaros.
”Con angustias y migrañas la vida se va escurriendo y el Tiempo se sale con la suya mañana igual que hoy.”
En muchos valles verdes se amontona la nieve atroz, el tiempo deshace los bailes y la pirueta del colimbo.
”Oh, meted las manos en agua, metedlas hasta las muñecas, mirad en la pileta y pensad que habéis perdido.”
El glaciar llama desde el armario, el desierto gime en la cama, y la grieta en la taza de té lleva tierra a los muertos.
”Allí el mendigo rifa billetes de banco y el gigante hechiza a Pulgarcito, y el pálido muchacho ruge de furia y Jill se tumba de espaldas.”
Oh, mirad en el espejo, mirad vuestra preocupación; la vida sigue siendo una bendición aunque vosotros no sepáis bendecir.
”Oh, quedaos en esa ventana mientras las lágrimas os queman, amaréis a vuestro mezquino prójimo con vuestro corazón mezquino”.
Ya se había hecho muy tarde, los enamorados se habían ido, los relojes habían dejado de zumbar y el río profundo seguía fluyendoLabels: W.H. Auden |
posted by Alfil @ 2:51 PM |
|
|